Colócate en una zona libre del Escritorio y haz clic con el ratón derecho. Obtendrás el menú contextual en el que debes seleccionar el comando Propiedades para acceder al cuadro de diálogo llamado Propiedades de Pantalla.
Pincha en la ficha Configuración para ver su contenido y cuando esto ocurra, localiza en la parte inferior el botón Avanzada... y haz clic en él.
Aparecerá otro cuadro de diálogo, en el que debes seleccionar la pestaña General para poder ver la casilla de verificación "Mostrar icono de configuración en la barra de tareas" actívala haciendo clic sobre ella de forma que quede marcada y pulsa el botón Aceptar de los dos cuadros de diálogo que mantienes abiertos.
Después de hacer esto Windows colocará un nuevo icono a la derecha de la barra de tareas. Haz clic en él y obtendrás un menú con las posibles profundidades de colores y resoluciones.
La que tiene la marca a la izquierda, corresponde a la resolución que tienes en ese momento. Si quieres cambiarla, sólo tienes que hacer clic en la entrada adecuada y automáticamente se producirá el cambio de resolución.