Si haces clic con el ratón derecho sobre una zona libre de la barra de tareas y luego en Propiedades, obtendrás esta ventana desde la cual puedes configurar a tu gusto el menú Inicio.
Si haces clic en la pestaña Menú Inicio accederás a las opciones de tener el escritorio clásico de Windows o el escritorio de Windows XP.
Después de cualquier modificación que hayas hecho debes pulsar sobre el botón Aplicar y luego el botón Aceptar de esta forma tendrán efecto tus cambios.